"El guerrero"
Era la hora.
Le
ayudó a vestirse para la batalla.
Retiró
el obi con suavidad, sujetó el kimono del cuello que iba deslizándose sobre
sus hombros hasta mostrar su torso desnudo. Cubrió su cuerpo con la blusa holgada,
ligera, que acariciaba sus hombros mientras sus miradas se cruzaban. Al
acercarse, solo un roce de sus labios.
Le
ayudó con la armadura que ajustó con suavidad.
La
tristeza de su mirada reflejaba la duda de volverle a ver algún día.
Esperaba
que él recibiera el torrente de emociones contenidas en su rostro en ese
preciso momento, antes de la partida.
"El último samurai" (escena)
Premonición de un microrelato erótico!? Ahí queda el reto....escrito y publicado!
ResponderEliminarSe dice que "No hay nada como un reto para sacar lo mejor de uno mismo". Reconozco que los retos me gustan.
EliminarDe la guerra y del amor nadir sale ileso. Los samurais no tenían miedo a la muerte. En la cultura occidental no se habla ni se enseña la muerte, si del amor.
ResponderEliminar¡Así es! Hablar de la muerte es un tabú y es tan natural como la vida, el amor...
EliminarNo conocía esa escena, ni la pelicula, claro. Pero tu microrelato ha hecho que visualizara, sobre todo, los sentimientos que en él se materializan.
ResponderEliminar¿Las imágenes potencian las palabras, o al revés...?
En este caso, las palabras te han hecho sentir lo que la imagen ha potenciado después. ¡Misión cumplida! ¡Gracias!
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